Nueva York con niños II parte

Volvemos a Nueva York con los niños, la verdad es que tengo tantas cosas que contaros y tantas fotos que tampoco quiero aburriros así que voy eligiendo por zonas, más o menos pero no sé si los días fueron como os los cuento o no.

Para movernos con los enanos utilizamos bus básicamente y metro en alguna ocasión. Compramos una metrocard en cualquier superfarmaciaotodoloquetepuedasimaginar la tienen compras una que vas recargando. 

El ticket normalmente lo tienes que sacar antes de montarte en el bus si hay maquinita sino en el propio bus, y se recargan en el metro.

Los niños menores de 6 creo que no pagan. Aquí os cuento que el transporte neoyorkino no es muy "friendly" con bebés con sillas y carritos. 

Vas a la compra con tu hija de 2 años, subes al bus, tienes que cerrar la silla, coger al bebé en brazos y tu compra sino el bus no arranca, qué deciros del metro. No vi muchos capazos y no me extraña.

Pero a lo que vamos cogimos un bus y nos fuimos a 11S Memorial. No sabría definiros la sensación, saber dónde estabas ese día, haber conocido las torres que no están, hacer entender a tus hijos de 7 y casi9 que hubo unos edificios enormes y que vinieron unos señores malos que estamparon 2 aviones y se derrumbaron.... Mucha curiosidad y sus padres incapaces de satisfacerla, ¿pero por qué los malos estallaron los aviones? ¿pero como eran las torres? ¿pero cómo se pudieron caer?

Coged las entradas antes de entrar, está muy bien indicado porque sino luego al entrar en el memorial justo harás más cola, cola de los que tienen ticket, cola de los que no. Es gratis o puedes donar lo que quieras.

Y ahí donde estaban las inmensas torres hay dos cascadas en las que el agua está corriendo constantemente y cae al vacío, y los nombres de todos y cada una de las personas que murieron grabadas alrededor, sobrecogedor. Vigilando el espacio el Edificio Liberty. Además de otras construcciones que se están construyendo.

Cómo hacíamos vida medio de new yorkers medio de turistas, ese día antes de recoger a los niños del cole también fuimos a la Estación Central o Grand Terminal. Un edificio increíblemente precioso por el que hay que pasar si o si. Además aquí hay un buen truco para ese Nueva York con niños que estamos haciendo, ya os dije hay que cambiar el chip.

Justo debajo del gran hall principal, dónde se va hacia los trenes hay un arco donde si hablas de un lado te oyen perfectamente del otro, no sé como se llama arco de los susurrros o algo así.

No tienes que hablar alto, la persona que está en la diagonal opuesta oirá sólo con un susurro: empezamos con hola mamá, hola tía, acabamos con caca, culo, pedo, pis...

Esta foto no es muy buena pero este es justo el sitio.

Ahí tenéis a Lino hablando con su padre que estaba en la otra punta y le oía como si fuese un altavoz.

Y para rematar este post tan largo y rollo vamos a tomarnos la mejor hamburguesa que he tomado hasta ahora, la del Shake Shack, basta con mirar la cola que hay en todos sus locales para saber que algo se cuece.
Mi abuelo materno, buen, muy buen comedor, siempre decía cuando íbamos de viaje, hay que parar dónde estén muchos camiones aparcados, eso significa que la comida es buena los camioneros saben los sitios mejores. Pues eso es lo mismo. 

Nosotros fuimos al de Madison Square Park, la foto de arriba a la derecha es la cola, las hamburguesas de muerte. Pides y te da un aparato como el de la guardería de Ikea, cuando vibra y luce vas a por tu comida y listo a chuparse los dedos. Además tiene al lado el Flatiron para deleite de mayores y un parque para deleite de los peques.

Y por hoy nada más, seguiremos informando...